martes, 27 de junio de 2017

Gaming Ladies ¿era para tanto?

Hoy ha pasado algo que me ha dejado tremendamente frío, lo ocurrido con el evento Gaming Ladies me ha dado mucha pena, pero pena de verdad, y no porque yo estuviera entusiasmado con el evento.
A mi, de entrada el evento me causaba sensaciones encontradas, por un lado entendía el concepto de hablar de un tema donde el género másculino había predominado sin hombres alrededor, lo entendía porque culturalmente a los hombres se nos educa para ser muy "echados para adelante" y a las mujeres para tener un perfil bajo cuando hay hombres delante, cualquiera que haya asistido a asambleas de algún tipo (yo lo se por las de Podemos) lo ve a los diez minutos de estar allí, por lo cual tener un espacio para expresarse sin miedo a que los convencionalismos sociales nos arrastren o nos limiten... tiene sentido.

miércoles, 14 de junio de 2017

El E3 de los cenizos

No sé si es que me hago mayor y no vivo las cosas tan visceralmente o qué, pero me ha llamado mucho la atención las reacciones de mucha de la gente que sigo en internet con el E3, tanto en tuiter como en medios especializados.
En la mayoría de la gente he notado como si hubiera sido una feria absolutamente decepcionante y en la que no han visto casi juegos en los que dejarse los dineros, pues que envidia, porque a mi no solo me han vendido un buen puñado de juegos, si no que encima voy a necesitar un PC nuevo antes de lo que me gustaría, pero vayamos por partes.


jueves, 8 de junio de 2017

Nintendo Switch y la zona de confort

Si hay algo en el sector de los videojuegos que haya sorprendido a propios y extraños durante este año ha sido el descomunal éxito de cara al público de Switch, el experimento híbrido de Nintendo.
 
 
Se han dado muchos motivos para explicar este tremendo pelotazo en ventas de una consola que, no lo olvidemos, sucedía a uno de los mayores fracasos comerciales de la historia de la compañía japonesa, una consola que llega con una potencia justísima para competir con el resto de plataformas de hardware para jugar que tenemos hoy en día en las tiendas, una consola que incluso para los últimos nintenderos vivos (entre los que me encuentro) iba a tener que luchar muchísimo para abrirse hueco entre la aplastante oferta de ocio digital que tenemos a día de hoy al alcance de la mano.

No tenemos ni puta idea.